Por primera vez en su historia, el Sistema Penitenciario del estado de Guanajuato celebró el Día Internacional del Orgullo LGBTI+ dentro de los centros penitenciarios, con una jornada inédita de expresión, inclusión y respeto a la diversidad. Un total de 828 personas privadas de la libertad, entre ellas 310 mujeres, participaron en actividades que marcaron un antes y un después en la forma de vivir la identidad sexual y de género tras los muros.
La celebración incluyó marchas del orgullo, pasarelas, carteles, expresiones culturales, proyecciones de cine y la realización de seis bodas, dos de ellas entre parejas del mismo sexo. Todo se desarrolló en un ambiente seguro, libre de incidentes y con el acompañamiento del personal penitenciario.
Las actividades se llevaron a cabo en distintos Centros Estatales de Prevención y Reinserción Social como León, Valle de Santiago, Acámbaro y Pénjamo, bajo el lema: “Soy gay, soy lesbiana, soy bisexual, soy transexual… soy humano”. La jornada permitió visibilizar historias de vida, de lucha y de orgullo, en espacios donde históricamente ha prevalecido el silencio.
“Esto nunca había ocurrido. Fuimos afortunadas en ser una de las primeras parejas en cumplir nuestro sueño”, compartieron Elitani y Joselyn, una de las parejas que contrajo matrimonio en este día histórico.