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La oficina del expresidente de Estados Unidos, Joe Biden, confirmó que ha sido diagnosticado con una forma agresiva de cáncer de próstata que presenta metástasis ósea.
El diagnóstico se dio a conocer tras una serie de estudios médicos que revelaron un nódulo prostático, derivado de síntomas urinarios persistentes. Los especialistas informaron que se trata de un cáncer con puntuación de Gleason 9 (grupo 5), considerada una de las más altas en agresividad. No obstante, el tumor es sensible a las hormonas, lo que permite opciones de tratamiento con terapia hormonal.
Biden, de 82 años, se encuentra acompañado de su familia mientras evalúan junto a su equipo médico el camino terapéutico a seguir.
Cabe recordar que en julio de 2024, Biden renunció a su candidatura a la reelección, en medio de cuestionamientos por su estado físico y mental. Su estado actual vuelve a poner en el centro la conversación sobre la salud de líderes políticos de edad avanzada.
La noticia conmueve especialmente por la historia personal del exmandatario, quien en 2015 perdió a su hijo Beau Biden a causa de un cáncer cerebral. Desde entonces, el expresidente ha impulsado la iniciativa “Cancer Moonshot”, con el objetivo de reducir drásticamente la mortalidad por cáncer en Estados Unidos.
La comunidad internacional se mantiene atenta a la evolución de su salud.