Parece increíble, pero el tiempo estimado para que la sonda Voyager 1 llegue a otro sistema planetario es de aproximadamente 40,000 años.
Su próximo gran encuentro se dará dentro de ese tiempo, cuando se acerque a 1.7 años luz de la estrella AC +79 3888, ubicada a unos 17.5 años luz de la Tierra. Sin embargo, hay un reto que enfrentar: con tantos años de funcionamiento, el suministro de energía de la Voyager 1 se reducirá, lo que significa que podría dejar de recopilar datos científicos alrededor del año 2025.
Las sondas Voyager funcionan como embajadoras y cápsulas del tiempo, llevando en sus discos de oro imágenes de la vida en nuestro planeta, diagramas de principios científicos, saludos en múltiples idiomas y música. Estos discos, diseñados para soportar la erosión de la radiación cósmica, están destinados a durar más de mil millones de años, actuando como mensajes en botella en el vasto océano del espacio.
En representación de México, la sonda incluye en su selección musical de 90 minutos la pieza “El cascabel”, un huapango de Veracruz interpretado por Lorenzo Barcelata y el Mariachi México.
Los ingenieros de la misión están comprometidos en desactivar la menor cantidad posible de instrumentos científicos, ya que las sondas proporcionan observaciones únicas desde el borde del sistema solar. Gracias a un cuidadoso ahorro de energía, se espera que ambas sondas sigan recopiendo datos, al menos un año más antes de que sea necesario apagar otros instrumentos a bordo.
La Voyager 1 continuará operando su magnetómetro y el subsistema de ondas de plasma, mientras que su instrumento de partículas cargadas de baja energía permanecerá activo hasta 2025. Por su parte, la Voyager 2 mantendrá en funcionamiento sus instrumentos de campo magnético y de ondas de plasma, con el subsistema de rayos cósmicos previsto para apagarse en 2026.
No se puede predecir con certeza cuánto tiempo más durarán estas sondas, pero lo que es seguro es que seguirán ofreciendo más sorpresas científicas a medida que se alejan de la Tierra, llevando consigo la rica herencia cultural de nuestro país hacia lo desconocido.